RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS
Partiendo de valores que nos representan como comunidad, que rezan inscritos en las columnas de entrada de nuestro centro e impregnan con sus colores todo el colegio, establecemos 4 pasos básicos de cómo resolver un conflicto:
De esta forma, el alumnado comprende que, para resolver un conflicto, primero hay que mantener la calma y realizar una escucha activa de la persona/as con la que hemos tenido el problema, empatizando y tratando de entender su punto de vista para, posteriormente; tratar de buscar una solución realizando un esfuerzo como compañeros/as y adquiriendo un compromiso para evitar que vuelva a suceder.
Para ello, detallamos los pasos a seguir tanto en infantil como en primaria, adaptando los pasos con pictos que les ayudan a expresar sus sentimientos en las diversas fases sin necesidad de escribir.
Estos modelos, se dieron a conocer a la comunidad educativa, están presentes en las aulas y forman parte del día a día de nuestro alumnado. Cuando se presenta un conflicto, puede resolverse en tan solo 5 minutos si ambas partes quieren hacerlo. La idea es que paulatinamente, la intervención del adulto en la resolución, sea menor; aprendiendo el alumnado a resolverlo solos/as.
Este sistema, además de sencillo; favorece la cultura de diálogo y empatía encontrándose apoyado por las normas de aula y centro además de la participación de la comunidad educativa en los diferentes planes y proyectos.